Las adicciones se han convertido en un grave problema de salud pública, ya que afectan a miles de personas y tienen consecuencias tanto para quienes las padecen como para sus familias. Existe la importancia de abordar este tema desde una mirada integral que considere los múltiples factores biológicos, psicológicos y sociales que intervienen en el desarrollo de la adicción, más allá de juzgar al adicto desde una perspectiva externa.

El objetivo del trabajo es indagar en profundidad la experiencia subjetiva de la adicción, comprendiendo qué le ocurre a la persona adicta desde un enfoque integral que incluya las dimensiones psicológica, biológica, social y espiritual. Para ello, se propone distinguir entre una "moral de primera persona", centrada en la subjetividad del adicto, y una "moral de tercera persona" más externa.

Asimismo, se plantea estudiar cómo se desordena la dinámica del deseo y la acción en el adicto, para luego mostrar cómo es posible recuperarla mediante el cultivo de virtudes y la integración en relaciones significativas. Otro elemento que se destaca es la dimensión amorosa de toda acción humana y cómo sanar el deseo y la voluntad del adicto a través de Dios.

En definitiva, conciliando un enfoque de "primera persona", las virtudes y el amor, se aspira a ofrecer una mirada compasiva e integral sobre la adicción que considere en profundidad la complejidad de la persona adicta.